El vocero presidencial, Jorge Richter, ha confirmado que dejará su cargo en los próximos días y se dedicará a hablar de política y proponer “propuestas estructurales” para el país. En una entrevista con Unitel, Richter aseguró que el presidente Luis Arce ya está al tanto de su decisión, la cual se formalizará en breve.
Confirmación de su Salida
Richter manifestó que su permanencia como vocero presidencial ha llegado a su fin, destacando que su tiempo en el cargo ha sido suficiente y sin deudas personales. “Ha sido una vocería particular, seguramente, a mi estilo, muy reflexiva, muy de búsqueda de diálogo, no ha sido una vocería polarizante con nadie, no le ha faltado el respeto tampoco a nadie, no he adjetivado contra nadie y bueno, es tiempo de ir al otro escenario”, afirmó.
Nuevos Enfoques
En su nuevo rol, Richter pretende enfocarse en discutir política y presentar propuestas estructurales para Bolivia. “Voy a hablar de política y de propuestas estructurales para nuestro país, para que los bolivianos las dialoguen, las escuchen, si me dan ese beneficio y esa favorabilidad de atender lo que uno dice y que esas propuestas sirvan para instalarse en el tiempo electoral y sean parte de las soluciones que Bolivia necesita”, explicó.
Críticas y Reflexiones
Richter también criticó la tendencia de las autoridades a aislarse de la realidad y señaló que el Gobierno no ha podido satisfacer plenamente las expectativas de la sociedad boliviana. “No le estamos dando respuestas a la sociedad boliviana en la medida en la que las expectativas se han instalado (…) Entonces decimos que la calidad de la democracia o que esta democracia no nos responde. Hay que perfeccionar el Estado plurinacional, hay que reformar la Justicia”, concluyó.
Contexto y Relevancia
La salida de Jorge Richter se produce en un momento crucial para Bolivia, donde las demandas sociales y las expectativas de la población son altas. Su intención de seguir contribuyendo al debate político y proponer soluciones estructurales refleja un compromiso continuo con el país, más allá de su rol oficial.
Este cambio en la vocería presidencial abre un nuevo capítulo en la carrera de Richter, quien busca influir en el futuro político de Bolivia a través de propuestas y diálogos constructivos. Su enfoque en la necesidad de perfeccionar el Estado plurinacional y reformar la Justicia indica un reconocimiento de las áreas que requieren atención urgente para mejorar la calidad de la democracia en el país.